Hay una expresión bíblica que llama muchísimo la atención en referencia a la nueva identidad y propósito de vida de los creyentes. La Biblia nos dice que Dios nos hizo reyes y sacerdotes y en esta publicación vamos a ver a la luz del contexto bíblico lo que significa exactamente.
Si nos remitimos a las funciones propias de un rey, el rey era una persona que representaba a nivel político a su reino ante otros reinos y naciones. Era la persona encargada de dirigir el rumbo de la nación o reino, y sus decisiones tenían un impacto directo en la sociedad a nivel social, político, económico y militar.
Por otro lado una sacerdote, era una persona encargada de consagrarse religiosamente y se encargaba de la obra litúrgica referente al culto de un dios o deidad.
Los reyes y sacerdotes en tiempos del Antiguo Testamento.
En cuanto al contexto bíblico del Antiguo Testamento, podemos notar que los reyes eran los representantes políticos de los reinados de Israel y Judá. Ellos debían de procurar mantener la pureza espiritual del pueblo y depender activamente de Dios en sus decisiones.
Por así decirlo, los reyes bajo la voluntad de Dios, eran las personas que debían de guiar al pueblo con sus funciones políticas, con el apoyo de los profetas de Dios para recibir exhortación e instrucciones, y de los sacerdotes para garantizar la pureza espiritual y moral del pueblo.
En ese contexto los sacerdotes eran las personas idóneas para ayudar al rey a conseguir los objetivos morales y espirituales que Dios daba a conocer por medio de la ley y el mensaje de los profetas. La Biblia dice en Apocalipsis 1:6 que Dios nos hizo reyes y sacerdotes y en los próximos párrafos veremos lo que significa.
y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.
Apocalipsis 1:6
De modo que la Biblia no solamente declara que quienes pertenecemos a Cristo somos redimidos, sino que somos elevados a una posición de autoridad y servicio espiritual ante Dios. A como te dije al inicio, la expresión “Reyes y sacerdotes” describe una nueva identidad y propósito que Dios nos ha otorgado a nosotros como su pueblo.
Reyes llamados a gobernar con propósito.
Para conocer lo que significa que Dios nos hizo reyes y sacerdotes debemos de comprender las implicaciones de cada título en relación a nuestra vida cotidiana y con Dios.
El hecho de que Dios afirme que nos hizo reyes, no significa que tenemos dominio sobre las personas, sino que nos dice que tenemos autoridad espiritual y dominio propio sobre nuestras decisiones, pensamientos y acciones. De modo que ser un rey, implica saber gobernarse a sí mismo conforme a los principios morales y espirituales del reino de Dios.
Dios nos hizo un llamado a ejercer dominio sobre nosotros mismos y de esa manera representar su justicia y voluntad. El creyente que es capaz de vivir bajo lo principios del reino de Dios, es capaz de reflejarlos en la familia, trabajo, matrimonio, finanzas y demás relaciones personales.
De modo que somos reyes cuando vivimos con dominio espiritual, dominamos sobre nuestros deseos carnales, y dejamos de ser esclavos del pecado, del temor y las circunstancias. Nuestro caminar se debe de caracterizar por la fe y la confianza en que Jesús está con nosotros y nos ha dado autoridad para vencer.
Ahora que vimos lo que significa que Dios nos hizo reyes, a continuación veremos lo que significa que nos haya sacerdotes.
Somos sacerdotes con un llamado para servir y representar.
En los periodos del Antiguo Testamento el sacerdote era el puente entre Dios y el pueblo. Era la persona encargada de ofrecer los sacrificios por el pueblo y oraban por los demás. En la actualidad, con Cristo somos sacerdotes con un llamado a tener una vida de adoración, intercesión y santidad.
Esto significa que nosotros mismos podemos acercarnos directamente a Dios, sin la intervención de ninguna otra persona. Y no solamente eso, también somos instrumentos para llevar a otros la presencia de Dios. Por lo que también está escrito:
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
1 Pedro 2:9
Así nuestra vida se convierte en una altar viviente, en donde honramos a Dios con nuestras palabras, decisiones y servicios hacia los demás.
Un llamado doble de autoridad y servicio.
El hecho de que Dios nos haya hecho reyes y sacerdotes no solo significa un cambio de identidad o una asignación de títulos, también significa un cambio en los propósitos y motivaciones que deben de haber en nosotros.
La combinación de estas dos identidades “reyes y sacerdotes” nos revela el equilibrio perfecto que Dios quiere en nosotros: Una autoridad sin orgullo y un servicio sin debilidad.
Un rey sin un compromiso sacerdotal ante Dios puede corromperse moral y espiritualmente, y un sacerdote sin autoridad carece de impacto e influencia. Por esa razón ambos roles se unen al hecho de reconocer a Jesús. De modo que el creyente verdadero ejerce poder espiritual sobre demonios y potestades con humildad y sirve a los demás con autoridad moral y espiritual.
Lo que significa que Dios nos hizo reyes y sacerdotes.
Ser hechos reyes y sacerdotes significa que Dios nos ha confiado un gran honor y privilegio. Dios nos concedió el honor de reinar sobre nosotros mismos y las circunstancias de la vida. Al mismo tiempo nos dio el privilegio de servir a los demás con nuestro corazón consagrado a la voluntad divina.
De modo que no somos espectadores pasivos del reino de Dios, sino que nos hizo partícipes del mismo por medio de nuestras obras de justicia y amor que nacen de nuestro corazón restaurado por la obra vivificante del Espíritu Santo.
Gracias por llegar hasta el final de esta publicación, dime: ¿Cómo te hace sentir ahora que sabes lo que significa que Dios nos hizo reyes y sacerdotes? ¿Estás reinado sobre tus deseos pecaminosos y las circunstancias de la vida por medio de tu fe y obediencia? ¿Estás llevando la presencia de Dios a otros? ¡Déjame saberlo en los comentarios!
Puedes acceder a mi publicación anterior en el siguiente enlace: ¿Qué significa que Dios no comparte su gloria con nadie?
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Teólogo, escritor y erudito biblista ampliamente comprometido con la verdad. Fundador y Webmaster de la plataforma digital: Pura Biblia.